El texto que el lector tiene en sus manos es una amalgama de voces, plagado de relatos y vivencias del escritor, interpretaciones, memorias traducidas para el diálogo. Trabajo de investigación – creación que delimita el término no-velar, forma de metaforizar la experiencia a partir de la lectura de las voces, ecos, silencios y olvidos que emanan de los signos. Para tal fin, se divide en tres capítulos: Silencios y olvidos desde el lenguaje y las estructuras sociales; Leer silencios y olvidos en memorias familiares y; De la novela al no-velar: una forma de resistencia. Se comienza por establecer que la memoria se configura a través del relato que tejemos con nuestros recuerdos, somos narración, de allí la importancia del lenguaje, puente que nos une a otros. Siguiendo a Saussure (1991) y Lacan (2009), se propone un “desmembramiento” del signo en significantes y significados, que producen silencios y olvidos, respectivamente. El segundo capítulo se centra en la metodología, la recolección y agrupación de las memorias familiares y no-familiares del investigador, o en términos de Freud (1972), lo heimlich - unheimlich. Con los aportes de Ricoeur (1980), Lakoff y Johnson (2017) se plantea un ejercicio de excritura a través de la metáfora, ente vivo que trasforma la experiencia dándole sentido y permitiendo la comunicación. Concluye estableciendo que construir memoria es similar a la invención en el arte, busca la potencialidad y no la finalidad del acto en sí. La novela, género que permite la amalgama de voces, la palabra plurisemántica, da paso al no-velar, posibilidad negada, potencia-de-no, caminos de una memoria existencial que al silenciarse permanece en el olvido, ausencias presentes que retornan. La resistencia recae en esas formas de no-velar la realidad, de estar constantemente en busca del signo perdido. The text that the reader has in his hands is an amalgam of voices, plagued of tales and experiences of the writer, interpretations, memories translated for dialogue. Research work - creation that defines the term no-velar, a way of metaphorizing the experience from the reading of voices, echoes, silences and forgetfulness that emanate from the signs. To this end, it is divided into three chapters: Silences and forgetfulness from language and social structures; Read silences and forgetfulness in family memories and; From the novel to no-velar: a form of resistance. It begins by establishing that memory is configured through the tale that we weave with our memories, we are narration, hence the importance of language, a bridge that unites us to others. Following Saussure (1991) and Lacan (2009), a “dismemberment” of the sign into signifiers and meanings is proposed, which produce silences and forgetfulness, respectively. The second chapter focuses on the methodology, the collection and grouping of the researcher's family and non-family memories, or in terms of Freud (1972), the heimlich - unheimlich. With the contributions of Ricoeur (1980), Lakoff and Johnson (2017) an exercise in writing is proposed through metaphor, a living entity that transforms the experience by giving it meaning and allowing communication. It concludes by stating that building memory is similar to invention in art, it seeks potentiality and not the purpose of the act itself. The novel, a genre that allows the amalgamation of voices, the multisemantic word, gives way to the no-vela, denied possibility, potency-of-not, paths of an existential memory that when silenced remains in oblivion, absents presences that return. The resistance lies in those ways of novelar the reality, of being constantly in search of the lost sign.