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Historia biogeográfica de la flora de Sierra Nevada

Authors :
Ministerio de Educación y Ciencia (España)
Ministerio de Ciencia e Innovación (España)
Alba Sánchez, Francisca [0000-0003-0387-1533]
López Sáez, José Antonio [0000-0002-3122-2744]
González Hernández, Antonio [0000-0003-0964-7284]
Alba Sánchez, Francisca
González Hernández, Antonio
López Sáez, José Antonio
Ministerio de Educación y Ciencia (España)
Ministerio de Ciencia e Innovación (España)
Alba Sánchez, Francisca [0000-0003-0387-1533]
López Sáez, José Antonio [0000-0002-3122-2744]
González Hernández, Antonio [0000-0003-0964-7284]
Alba Sánchez, Francisca
González Hernández, Antonio
López Sáez, José Antonio
Publication Year :
2019

Abstract

La diversidad vegetal de Sierra Nevada es resultado de múltiples procesos que han determinado que se haya producido la sucesión continuada de contingentes florísticos y comunidades vegetales de diverso origen a lo largo de su historia geológica. Gran parte de la flora actual de Sierra Nevada proviene de latitudes septentrionales de Europa ( elementos arctoterciarios), cuando aún los materiales que dieron lugar al macizo nevadense estaban unidos al este de la placa ibérica en el Oligoceno, lejos de su emplazamiento final al sur de Iberia. A finales de este período, y durante todo el Mioceno, el clima inicia una tendencia hacia la aridez y enfriamiento global que provoca la extinción de parte de la flora paleotropical de Iberia, y su progresiva sustitución por la flora arctoterciaria. Es cuando la vegetación del sureste peninsular se enriquece en elementos sabanoides, quedando relegados los bosques siempreverdes y semideciduos a las zonas de mayor disponibilidad hídrica. La alta montaña nevadense es ocupada por cinturones de coníferas, mientras que por la franja costera y lagunas salobres se distribuyen los manglares. La desecación parcial del Mediterráneo durante la crisis del Messiniense promueve la creación de puentes que constituyen importantes rutas migratorias para especies irano-turánicas y saharo-síndicas. Tras la apertura del Estrecho de Gibraltar en el Plioceno, se consolida la estacionalidad propia del clima mediterráneo, que dio lugar a una vegetación muy similar en estructura a la actual. Finalmente, el Cuaternario supone la culminación del lento proceso de enfriamiento iniciado en el Terciario, durante el cual la alternancia de períodos glaciales e interglaciales proporciona refugio a táxones arctoterciarios e induce la extinción de los últimos elementos paleotropicales. La reciente recuperación climática del Holoceno supuso la expansión de bosques de frondosas del género Quercus.

Details

Database :
OAIster
Publication Type :
Electronic Resource
Accession number :
edsoai.on1286562998
Document Type :
Electronic Resource