El Cabildo catedralicio de Mallorca y la política de Fernando II el Católico = The Cathedral Chapter of Majorca and the Politics of Fernando II the Catholic

Fernando II e Isabel de Castilla obtuvieron el título de “Reyes Católicos” gracias a su política religiosa. El presente artículo estudia las relaciones entre el Cabildo de Mallorca y el rey católico, con el objetivo de analizar la respuesta de la institución canonical a la política real. A tal efecto, se han revisado los libros de actas capitulares. Las cuestiones económicas fueron una de las principales causas que motivaron el envío de embajadas al rey. También hubo un cierto enfrentamiento en el establecimiento de la Inquisición, mientras el Cabildo colaboró con las campañas norteafricanas del monarca. En el campo de la cultura, representada por el lulismo, Fernando II no encontró un apoyo significativo del Cabildo, aunque sí de algunos canónigos en particular. Finalmente, el colegio canonical también realizó las exequias acostumbradas a los miembros de la familia real. Todo ello presenta un Cabildo complaciente que no se enfrentó abiertamente al monarca.Fernando II and Isabel of Castile obtained the title of «Catholic Monarchs» thanks to their religious policies. This paper considers the relationship between the chapter of Majorca and the Catholic king, with the aim of analysing the response of the canonry to royal politics. For this purpose, the books of the chapter proceedings have been examined. Economic issues were one of the main reasons for sending embassies to the king. Furthermore, there was a confrontation over the introduction of the Inquisition, while at the same time the chapter cooperated during the North African campaigns of the king. In the cultural sphere, dominated by Lullism, Fernando II did not find significant support from the chapter, with the exception of a few individual canons. Lastly, the canons participated in the customary funeral rites for the royal family. On the whole, the conclusion drawn is one of a complaisant chapter that never openly confronted the monarch.