La juventud de los estudios vinculados con las publicaciones informativas del período estudiado (1618-1635) ha dado lugar a que pocos autores se interesen por la redacción informativa. Ahora bien, en este momento histórico hay una gran diversidad de publicaciones informativas, tal y como ya hemos explicado. Por ello, nos hemos visto obligados a centrarnos en una modalidad en particular, las publicaciones informativas politemáticas, que son aquellas publicaciones que narran diferentes acontecimientos a través de avisos. Este tipo de publicaciones era minoritario, tal y como puede observarse en cualquier catálogo. En cualquier caso, es en ellos donde hemos encontrado un estilo informativo más cercano a los cánones actuales, así como una tradición o antecedentes suficientes como para comprender (o al menos aproximarnos) la lógica de su redacción. La ausencia de estudios vinculados con esta cuestión es el principal justificante académico de su elección como objeto de estudio7. Ya hemos hecho referencia en la introducción de este trabajo a las causas de la elección del período histórico abarcado, por lo que no nos extenderemos más en ello. Con respecto a la decisión de centrarnos en publicaciones de Sevilla, Valencia, Madrid y Barcelona, lo justificamos por el hecho de que eran las cuatro grandes potencias impresoras de Castilla y Aragón. De hecho, Fernández Travieso y Pena Sueiro señalan: “Madrid, con 1.101 ediciones [en la Biblioteca Digital de Relaciones de Sucesos]; Barcelona, con 979; y Sevilla, con 896, son los principales núcleos de edición de relaciones de sucesos en español. En segunda instancia, solo llegan al centenar Valencia con 252 ediciones y Zaragoza con 100” (2013, 129). El estudio de la génesis de las publicaciones politemáticas nos invita a doblar la investigación en dos partes asimétricas. En primer lugar, el estudio del proceso de producción intelectual del texto, lo que nos obliga a una reflexión sobre las rutinas de producción informativa del período, entendiendo por las mismas el conjunto de costumbres o hábitos adquiridos por mera práctica y de manera más o menos automática. En segundo lugar, el estudio de la redacción informativa a través del análisis directo de los textos, en especial los esquemas textuales más frecuentes, el estilo y otros aspectos lingüísticos. El estudio del proceso de producción merecería una tesis completa por lo que, tras proponer un modelo general, nos centraremos en la procedencia de la información ofrecida por los textos en el capítulo 13(en especial la figura de la fuente dentro de las publicaciones politemáticas a través de las atribuciones). Por su parte, la redacción informativa será abordada en los capítulos 14 y 15. El primero se concentrará en la redacción de los avisos y sus modalidades, mientras que el segundo se concentrará en los diferentes tipos de publicación de acuerdo a la redacción. A partir de aquí, no deja de ser pertinente una revisión bibliográfica para conocer lo escrito sobre nuestro objeto de estudio y las principales tendencias en los estudios especializados.