Resumen Objetivo: La osteonecrosis de maxilares (ONM) es una enfermedad recientemente descrita cuya etiopatogenia es desconocida, aunque se ha atribuido, entre otras causas, al tratamiento prolongado con bifosfonatos. Sin embargo, mientras que la ONM es una patología localizada, la acción de los bifosfonatos es generalizada, es decir, afecta a todos los huesos. No hay estudios que muestren el estado óseo general de los pacientes con ONM. Con este trabajo hemos querido estudiar en pacientes afectos de ONM dicho estado general mediante medidas cuantitativas y estimaciones cualitativas del hueso por medio de la densidad mineral ósea (DMO) y el trabecular bone score (TBS) y los parámetros ultrasonográficos en el calcáneo (QUS), además de la presencia de otras enfermedades y la toma de fármacos (especialmente los bifosfonatos) en los pacientes con ONM que pudieran participar en su etiopatogenia. Material y método: Estudio observacional y transversal de casos y controles, realizado en 304 pacientes de ambos sexos, en los que el grupo de casos (grupo I) estaba formado por 24 pacientes que habían sufrido una ONM, mientras que el grupo control (grupo II) estaba formado por 280 pacientes que no presentaban ONM y que recibían bifosfonatos desde un mínimo de 5 años por causas diversas. A todos ellos se les realizó una densitometría ósea (DXA, Hologic 4500 Discovery®) en la columna lumbar y en la extremidad proximal del fémur. Además, se les realizó mediciones del TBS en la columna lumbar, así como de los parámetros ultrasonográficos en el calcáneo (Hologic, Sahara®) en el pie dominante (QUS). Resultados: Los pacientes afectos de ONM tenían una mayor comorbilidad que los controles, con una mayor prevalencia de las siguientes enfermedades: diabetes mellitus, cáncer, artritis reumatoide, hipertiroidismo, cardiopatía, arritmias, insuficiencia cardíaca e hipercolesterolemia. Por ello, el consumo de corticoides, (orales e inhalados), anticoagulantes, hipnóticos, bifosfonatos i.v. (zoledronato), y quimioterapia antineoplásica fue también mayor entre los pacientes afectos de ONM que los pacientes controles. Sin embargo, entre los pacientes con ONM el porcentaje que tomaba bifosfonatos orales fue menor. Los valores densitométricos (DMO medida en la columna lumbar L2-L4, cuello femoral y total de cadera) fueron más elevados en los pacientes con ONM en comparación con los de los controles. El TBS no mostró diferencias estadísticamente significativas entre ambos grupos, y los ultrasonidos presentaron valores más elevados de QUI y SOS en los pacientes con ONM que en los controles. La prevalencia de fracturas por fragilidad fue similar en ambos grupos. Conclusiones: Nuestros pacientes afectos de ONM mostraron una mayor comorbilidad y un mayor consumo de fármacos que los pacientes del grupo control, a excepción de bifosfonatos orales. Por otro lado, tanto la DMO como los parámetros ultrasonográficos mostraron valores más elevados en los pacientes con ONM que los controles. Si consideramos la DXA como una técnica medidora de la cantidad de masa ósea, y el TBS y la ultrasonografía de calcáneo técnicas estimadoras de aspectos cualitativos del hueso, podemos suponer que ni la cantidad ni la calidad óseas en general parecen estar afectadas en la ONM, siendo probablemente otro su mecanismo etiopatogénico. Los bifosfonatos orales no parecen estar entre los fármacos que participen en la etiología de la ONM, aunque sí los bifosfonatos más potentes que se administran por vía intravenosa, si bien no pueden considerarse independientemente de la patología subyacente para la cual se administran. Summary Objetive: Osteonecrosis of the jaw (ONJ) is a recently reported disease whose origin and development are unknown, although prolonged bisphosphonate treatment has been attributed, among other causes. While ONJ is a localized condition, the action of bisphosphonates is widespread and affects all bones. No studies show the general bone status of patients with ONJ. Our study examines the general condition in patients with ONJ using quantitative measurements and qualitative estimates of bone by means of bone mineral density (BMD) and trabecular bone score (TBS) and ultrasound parameters in the calcaneus (QUS), along with other diseases and the taking of drugs (especially bisphosphonates) in patients with ONJ who may be involved in the pathogenesis. Material and method: Observational and cross-sectional study of cases and controls, conducted in 304 patients of both sexes, in which the case group (group I) was formed by 24 patients who had suffered ONJ. The control group (group II) contained 280 patients who did not present ONJ and who received bisphosphonates over at least 5 years for various reasons. All of them underwent bone densitometry (DXA, Hologic 4500 Discovery®) in the lumbar spine and proximal femur. In addition, TBS measurements were made in the lumbar spine, as well as ultrasound parameters in the calcaneus (Hologic, Sahara®) in the dominant foot (QUS). Results: Patients suffering ONJ presented greater comorbidity than controls, with a higher prevalence of diabetes mellitus, cancer, rheumatoid arthritis, hyperthyroidism, heart disease, arrhythmias, heart failure and hypercholesterolemia. Therefore, the consumption of corticosteroids, (oral and inhaled), anticoagulants, hypnotics, bisphosphonates i.v. (zoledronate), and antineoplastic chemotherapy was also higher among patients with ONJ than control patients. However, among the patients with ONJ the percentage taking oral bisphosphonates was lower. Densitometric values (BMD measured in lumbar spine L2-L4, femoral neck and total hip) were higher in patients with ONJ compared to those in controls. The TBS showed no statistically significant differences between the two groups, and the ultrasound showed higher values of QUI and SOS in patients with ONJ than in controls. The prevalence of fragility fractures was similar in both groups. Conclusions: Patients with ONJ in our study presented greater comorbidity and a higher consumption of drugs than the patients in the control group, except for oral bisphosphonates. On the other hand, both BMD and ultrasound showed higher values in patients with ONJ than in controls. If we consider DXA as a technique for measuring the amount of bone mass, and TBS and calcaneal ultrasound estimating qualitative aspects of bone, we could assume that neither bone quantity nor quality in general seems to be affected in ONJ, and that its etiopathogenic mechanism is probably another. Oral bisphosphonates do not appear to be among the drugs involved in ONJ’s origin and development, but the most potent and intravenously administered bisphosphonates are, although they cannot be considered independently of the underlying disease for which they are administered.