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The COVID-19 pandemic has led to unprecedented changes in the care and attention of ill people and in the treatment of the bodies of the deceased. This article analyses the experiences of healthcare personnel in hospitals and nursing homes, as well as of relatives of people who died during the first months of the pandemic in Barcelona (Spain). Isolation, fear of infection and the lack of biomedical infrastructures, health professionals, protective equipment and material resources led to palliative care and mourning practices being resignified. This article provides greater insight into the effects of the pandemic on the processes in support of illness and death. To this end, we propose the concept of “palliative support”, which allows us to analyse biopsychosocial care adapted to the circumstances. Using an ethnographic approach and through the narratives of health workers and relatives, we show how the ban on visits and the interruption of the usual rituals of death and mourning gave way to new practices of support, communication and ritualisation. However, these practices failed to appease the feelings of neglect and indignation of those who witnessed the loneliness of the sick or those who were unable to say goodbye to their loved ones and saw their funeral rites eliminated or postponed., La pandemia de COVID-19 ha provocado cambios sin precedentes en la atención y cuidado de las personas enfermas y en el tratamiento de los cuerpos difuntos. Este artículo analiza las experiencias del personal sanitario de hospitales y residencias de mayores, así como de familiares de personas que fallecieron durante los primeros meses de la pandemia en Barcelona (España). El aislamiento, el miedo al contagio y la carencia de infraestructuras biomédicas, profesionales sanitarios, equipos de protección y recursos materiales propiciaron una resignificación de los cuidados paliativos y de las prácticas de duelo. En este artículo contribuimos a la comprensión de los efectos de la pandemia en el acompañamiento a los procesos de enfermedad y muerte. Proponemos para ello el concepto de “acompañamiento paliativo”, el cual permite analizar la atención biopsicosocial adaptada a las circunstancias. Mediante un enfoque etnográfico y a través de las narrativas del personal sanitario y de parientes, se comprueba cómo la prohibición de las visitas y la interrupción de los rituales de muerte y duelo habituales dieron paso a nuevas prácticas de atención, comunicación y ritualización. Sin embargo, estas no lograron apaciguar los sentimientos de abandono e indignación de quienes fueren testigos de la soledad de los enfermos o de aquellos que no pudieron despedirse de sus seres queridos y vieron eliminados o postergados sus ritos funerarios.