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Una de las razones por las que no se utiliza apenas el injerto en melón es la falta de afinidad entre los cultivares de tipo español (Piel de Sapo) y los patrones interespecíficos de Cucurbita (tipo Shintoza), que son las más tolerantes a Monosporascus y MNSV, capaces de producir el colapso. Los cultivares de tipo español, sin embargo, son plantas compatibles con portainjertos de la especie Cucumis melo (melón), pero de éstas, según nuestra experiencia, ninguna es capaz de soportar un ataque intenso de Monosporascus. El injerto, utilizando como patrón intermedio un cultivar con mejor compatibilidad, puede reducir los problemas que ocasiona la falta de afinidad. El injerto (simple y doble adosado) se hizo los días 26 y 28-03-07. La plantación se realizó el 17-04-07 en un campo que los 8-10 años anteriores había tenido sandía injertada. El marco de plantación era de 2,5 entre hileras y 0,675 y entre plantas (0,59 plantas/m2). La parcela elemental constaba de 8 plantas. La distribución del experimento fue de bloques al azar, con cuatro repeticiones. El injerto de Piel de Sapo directamente sobre Cucurbita híbrida, a diferencia de lo que ha ocurrido en otras ocasiones, ha funcionado perfectamente, no observándose «miriñaque» en la unión del injerto de ninguna de las plantas, ni se ha producido clorosis o muerte prematura en ningún caso. Las plantas han producido perfectamente y han aguantado hasta el final. A pesar de ello, el injerto intermedio con el cultivar Sienne ha mejorado ligeramente la producción, el número de frutos, el aspecto de las parcelas y el porcentaje de plantas vivas al final del cultivo. Este cultivar, injertado sobre Strongtosa, ha tenido mejor comportamiento que el resto, lo cual indica que la unión del injerto, en este caso, es perfecta. La mayor producción comercial ha sido la de la combinación Piel de Sapo/Sienne/ Strongtosa (4,93 kg/m2), que ha sido significativamente mayor que la del resto de combinaciones. Todas las plantas injertadas han producido significativamente más (99% de probabilidad) que las no injertadas.

Actualmente se ha comenzado a utilizar un nuevo procedimiento de injerto, «adosado», que presenta algunas variaciones respecto a los métodos anteriormente empleados (aproximación y púa). Con el fin de comparar el comportamiento en campo de las plantas injertadas con los tres procedimientos, se han injertado sandías del cultivar Reina (triploide) y Dulce Maravilla (diploide) sobre Shintoza (C. maxima x C. moschata) y se ha dispuesto un experimento con distribución de bloques al azar con cuatro repeticiones. La producción obtenida con las plantas con injerto adosado ha sido significativamente mayor que las obtenidas en plantas injertadas con los otros métodos. No se han detectado diferencias en tamaño del fruto.

Con el fin de adelantar la producción, se han comparado, sobre cuatro cultivares, los siguientes métodos de forzado: - Acolchado con polietileno negro, -Acolchado con polietileno transparente, -Cubierta flotante (Agril) y Testigo sin protección. El diseño ha sido un split plot protección-cultivares, con dos repeticiones por combinación. La mayor producción comercial se ha conseguido con el acolchado negro. Con todos los métodos de forzado la producción ha sido mayor que en el suelo desnudo, pero las diferencias no han sido significativas. Tampoco ha habido interacción cultivar-protección. A diferencia de lo que sucede con el acolchado, con la cubierta flotante la colocación y retirada son sencillas.

A raíz de una fuerte infección por virosis (enanismo Clorótico SPCSV y Moteado plumoso SPFMV) que casi terminó con la producción de boniato en la Comunidad Valenciana, el IVIA realizó un saneamiento de diferentes líneas del material vegetal disponible. De todas las líneas libres de virosis, los cultivadores de boniato eligieron como más interesantes dos de ellas: Clon 4 (Blanco Valenciano) y Clon 5 (Blanco de «agulla») El Centro Internacional de la Papa (CIP) de Lima (Perú), nos envió material vegetal libre de virus de las líneas de boniato de carne blanca, procedente de todo el mundo, que les pareció más interesante. Se compararon 13 cultivares del CIP y tres clones de material vegetal autóctono. La distribución del ensayo fue de bloques al azar, con cuatro repeticiones. El cultivar de mayor producción ha sido TIS-3290, seguido de 199043.4, 199014.6 y Ning Shu. El testigo, Clon 4, ha estado en una zona intermedia. El mayor peso medio de raíz ha sido del cultivar 199043.4 y le seguía en tamaño 199014.6.