Carlos A. Cañas, Cristian C. Aragón, Gloria L. Castaño, Ivana Nieto-Aristizábal, Ingrid Ruiz-Ordoñez, Alex Echeverri, Carmen M. Castillo, Gabriel J. Tobón, Juan Naranjo-Escobar, Iván Posso-Osorio, and Tatiana Méndez-Rayo
Introduction: Lupus nephritis (LN) is one of the most prevalent and severe complications of systemic lupus erythematosus (SLE), requiring reliable urine and serum biomarkers to evaluate it. Anti-nucleosome and anti-C1q antibodies are associated with LN in several geographic regions. Also, southwest Colombia has a heterogeneous ethnicity, which motivated the evaluation of the frequency and relationship of such markers with LN in this region. Methods: A cross-sectional study was conducted in a health centre in south-west Colombia in 84 patients diagnosed with SLE (57 without LN; 27 with LN) between 2016 and 2018. Demographic and clinical and laboratory features, including anti-dsDNA, complement, and anti-C1q and anti-nucleosome antibodies were compared in these patients. ELISA immunoassays were performed to measure the antibodies of interest in blood samples. Statistical analysis was carried out using STATA14 software (StataCorp, College Station, Texas, USA). Quantitative variables were summarised as means or medians and compared with Mann-Whitney or Two-sample t test. Categorical variables were shown as proportions, and compared with Chi-squared or Fisher's exact test. Correlation analysis between quantitative variables was calculated using Spearman's correlation. Results: Of all 84 patients, 27 patients had LN, of which 16 (59.2%) had a positive test for anti-nucleosome antibodies and 10 (37%) for anti-C1q antibodies. An association was found between anti-C1q and proliferative forms of LN and newly diagnosed LN. A correlation was found between anti-nucleosome and anti-C1q antibodies, and anti-dsDNA and low serum complement concentrations. Conclusion: Although both markers were found in variable percentages in SLE patients and seem not to be specific markers of LN in our population, anti-C1q was associated with proliferative forms of LN and de novo LN. RESUMEN Introducción: La nefritis lúpica (NL), una de las complicaciones más frecuentes y graves del lupus eritematoso sistémico (LES), requiere biomarcadores confiables de orina y suero para su evaluación. Los anticuerpos anti-nucleosoma y anti-C1q se asocian con la NL en varias regiones geográficas. En el suroccidente colombiano se asienta una etnia heterogénea, lo que motivó la evaluación de la frecuencia y la relación de dichos marcadores con NL en dicha región. Métodos: Realizamos un estudio transversal en un centro de salud en el suroccidente de Colombia, con 84 pacientes diagnosticados con LES (57 sin NL; 27 con NL) entre los anos 2016 y 2018. Se compararon las características demográficas, clínicas y de laboratorio, incluidos los anticuerpos anti-dsDNA, complemento, anti-C1q y anti-nucleosomas entre estos pacientes. Se realizaron inmunoensayos ELISA para medir los anticuerpos de interés en muestras de sangre. El análisis estadístico se llevó a cabo con el software Stata v.14 (Stata-Corp, College Station, Texas, EE. UU.). Las variables cuantitativas se resumieron como medias o medianas y se compararon con la prueba t de Mann-Whitney o Two-sample t test; las variables categóricas se mostraron como proporciones y se compararon con Chi-cuadrado o con la prueba exacta de Fisher. Para el análisis de correlaciones entre variables cuantitativas se calculó el coeficiente de correlación de Spearman. Resultados: Entre los 84 pacientes, 27 presentaban LN, de los cuales 16 (59,2%) tuvieron una prueba positiva para anticuerpos anti-nucleosoma y 10 (37%) para anticuerpos anti-C1q. Se encontró una asociación entre anti-C1q y formas proliferativas de NL, así como formas recientemente diagnosticadas de NL. Hubo una correlación entre los anticuerpos anti-nucleosoma y anti-C1q y el anti-dsDNA y las bajas concentraciones de complemento sérico. Conclusión: Aunque los 2 marcadores se encontraron en porcentajes variables de pacientes con LES y no parecen ser marcadores específicos de NL en nuestra población, la presencia de anti-C1q se asoció con formas proliferativas de NL y NL de novo.