101. La enseñanza del dibujo arquitectónico
- Author
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Sierra Delgado, José Ramón, Universidad de Sevilla. Departamento de Expresión Gráfica Arquitectónica., Universidad de Sevilla. GRUPO HUM063: CREATIVIDAD, ARTE Y SALUD (CAS)., Agudo Martínez, María Josefa, Sierra Delgado, José Ramón, Universidad de Sevilla. Departamento de Expresión Gráfica Arquitectónica., Universidad de Sevilla. GRUPO HUM063: CREATIVIDAD, ARTE Y SALUD (CAS)., and Agudo Martínez, María Josefa
- Abstract
Enseñar a dibujar es provocar un cambio, modificar una idea, empujar hacia la acción. El conocimiento es asimilado sólo por sintonía, simpatía o empatía, de ahí la importancia del profesor-catalizador. Pensemos que la enseñanza no es nunca objetiva; la transmisión de los datos supone siempre transformación de la información, y, en este sentido, el docente, percatándose o no de ello, se transforma en filtro, intérprete, o crítico ¿porque la enseñanza es siempre creativa, como la pintura o la arquitectura-. Por otro lado, la renovación de unos planes de estudios, por ejemplo, es, con frecuencia, una ocasión única para revisar lo existente, para elaborar `documentos de trabajo¿ y proponer nuevas fórmulas. Se trata de momentos para revisar la docencia y desechar caminos equivocados o dudas, que, sin embargo seguirán surgiendo, de forma reiteradamente natural, si no nos detenemos, es decir, siempre que sigamos vivos. Que duda cabe de que, en este sentido, hay siempre que aprender de los buenos maestros. Teodoro de Anasagasti -el conocido arquitecto contemporáneo de Antonio Palacios, Aníbal González y Leonardo Rucabado- hablaba de la ¿educación del sentimiento ... por encima de la razón¿, pero también de eliminar rutinas y apatías y de fomentar los viajes de estudio, de todo ello se reflexiona en su conocido libro La Enseñanza de la arquitectura, calificado por él mismo como de `propaganda y combate¿. En otro contexto, Sant¿Elia, insistía también en el `mundo del espíritu¿; para él, el problema del dibujo de arquitectura no era ¿reorganizar líneas¿, por eso criticaba con dureza el aspecto grotesco de los estilos históricos e insistía en el concepto de transitoriedad al afirmar que cada generación tendría que construirse sus propias casas, aspectos todos ellos que también afectaron a la docencia gráfica. Pero no eran los únicos en pronunciarse, otros también lo hacían algunas décadas después. Así, el entrañable Alejandro de la Sota, por ejemplo, afirmaba: ¿Creo más en la c, Teach drawing is to provoke a change, modify an idea, push the action. Knowledge is assimilated only tune, sympathy or empathy, hence the importance of teacher-catalyst. Think that teaching is never objective; transmission of data always involves transformation of information, and in this sense, the teacher, realizing it or not, it becomes filter, performer, or critic why teaching is always creative, like painting or architecture -. On the other hand, the renewal of a curriculum, for example, is often a unique opportunity to review the existing, to develop `trabajo¿ documents and propose new formulas. It is time to review the teaching and discard wrong paths or doubts, which nevertheless continue to arise naturally repeatedly, if we do not stop, that is, as long as we live. There is no doubt that in this sense, there is always to learn from good teachers. Anasagasti Theodore of-the-known contemporary architect Antonio Palacios, Aníbal González and Leonardo Rucabado- spoke of feeling ... ¿education above the razón¿, but also to eliminate routines and apathy and promote trips, of all that we reflect in his famous book the Teaching of architecture, described himself as `propaganda and combate¿. In another context, Sant¿Elia, also insisted on the `world of espíritu¿; for him, the problem of architectural drawing was no Do reorganize líneas¿, so harshly criticized the grotesque appearance of historical styles and insisted on the concept of transiency by stating that each generation would have to build their own homes, are all aspects which also they affected the graphic teaching. But they were not the only ones to rule, others also did some decades later. Thus, the endearing Alejandro de la Sota, for example, stated: I believe more in living with who knows, that when he teaches. The established teaching does not seem as effective. Best when one seeks finds, coexists with the `maestro¿¿, then to add: Maybe this coexistence can be replaced by the understanding of his works
- Published
- 2006