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El presente artículo tiene por objeto estudiar a grandes rasgos el funcionamiento de la Real Hacienda en el Virreinato de la Nueva Granada entre 1738 y 1800. Se hace un primer intento de cuantificar el uso y destino del excedente económico dado en el Virreinato; otra finalidad de la investigación es la de analizar los niveles administrativos diseñados por el Estado español en Indias con el fin de apropiarse de una parte de la riqueza nacional a través del sistema fiscal. Para estos efectos se hizo uso de la carta - cuenta correspondiente a las cajas de Cartagena y Santa Fe. No obstante que el presente ensayo se centra sobre el aspecto propiamente hacendístico el cual se deriva de la información, no sobra señalar su utilidad para el estudio del comportamiento de los otros sectores de la economía. Los ingresos (cargos) conformados principalmente por impuestos y préstamos efectuados a la corona, permiten analizar de manera indirecta la dinámica de las diferentes ramas de la actividad económica.

Se ofrece aquí al examen y conocimiento de investigadores y especialistas en una obra que consideramos fundamental para la historia de México porque estudia la labor de gobierno de Don Luis de Velasco, el segundo de los virreyes de Nueva España. El estudio de la institución virreinal, su instauración por España en el Nuevo Mundo y las características peculiares de ella, desarrolladas con perfiles propios a lo largo de las tres centurias, no ha sido aún objeto de toda la atención que merece por parte de los historiadores. La función del Virrey, que nace en las instituciones medievales aragonesas y castellanas de la Península, y va a tener un carácter honorífico y hereditario en Colón, se va a institucionalizar luego como forma de gobierno con base predominantemente nobiliaria en la época de los Austrias, y militar o burocrática al advenimiento de la Casa, de Borbón

En Santo Domingo, en los comienzos del siglo XVII, tuvo lugar una operación altamente significativa para la isla: las autoridades españolas determinaron concentrar su población en un área reducida de su territorio ordenando que se despoblara casi la mitad del mismo en su zona occidental. La efectividad de este mandato causó, naturalmente, un fuerte impacto a los moradores de la isla quienes tuvieron que adaptarse a las nuevas circunstancias según el cuadro de las motivaciones y realidades particulares de cada uno en aquel momento. Partiendo de esa base intentaremos comprobar en lo posible, cual fue la situación de La Española en la primera mitad del siglo XVII. Un período de adaptación entre las realidades preexistentes y las nuevas circunstancias en el ámbito económico y social, con los consiguientes problemas

El siglo XVIII es la centuria en la que los condicionamientos externos e internos de la defensa obligarán a la Corona española a robustecer su Institución Militar en Indias, dándole la entidad de Ejército de América, con unidades Fijas y de Refuerzo, Estados Mayores de Plazas y Tropas, líneas defensivas, puestos logísticos de distribución de pertrechos, etc. En resumen, un organigrama que tratará de ser operativo para conseguir algo casi imposible: la defensa de su Imperio Colonial Americano

Las Antillas que, a raíz del descubrimiento del Continente y de sus inmensas riquezas, habían quedado marginadas de todo interés, volvieron a recobrar a fines del siglo XVl y principios del XVII un importante papel en los planes de la Corona española. La razón de tal cambio, abundando en sabida afirmación, vino determinada por la posición estratégica del ámbito caribeño, cuyo dominio resultaba vital para contener el avance pirático y asegurar el tráfico mercantil entre España y América. Dentro de este panorama Cuba y más concretamente La Habana, fue sin duda la máxima exponente del baluarte defensivo hispánico en el área antillana, «llave de todas las Indias y donde se aseguran los tesoros de Vuestra Magestad», y a ella le correspondía en esta coyuntura del Caribe el papel más destacado. Así debía ser, puesto que a su puerto, lugar de cita y refugio de flotas y armadas, había que prestarle una especial atención

Real Cédula de S.M. Felipe V, organizando el Consejo de Hacienda y dictando reglas sobre su funcionamiento, Cédula Real dada en San Lorenço el Real del Escorial el 3 de julio de 1718, Real Cédula de S.M. Felipe V, organizando el Consejo de Hacienda y dictando reglas sobre su funcionamiento, Se ha respetado la puntuación original, Figura al final del texto: "Don Francisco Diaz Roman", Copia fechada en Madrid a 4 de julio de 1718, Sign.: A⁴, Impreso en papel timbrado con fecha de 1718

[S.l. : s.n., 1808] [3] h. ; 30 cm Texto fechado en Madrid, 15 de junio de 1808 Firmado por Bartolomé Muñoz

Se ha respetado la puntuación original, Texto firmado por: "Lic. D. Ioseph Garço", Fecha aproximada de impresión deducida del texto, en h. 1v consta: "en 30. de Diziẽbre del año passado de 663", Sign.: A-B², C⁴⁻¹, Grabado xilográfico de la Virgen en h. 1r, que precede al título, Inicial grabada, Verso de la última hoja en blanco

[S.l. : s.n., 1808] [3] h. ; 30 cm Texto fechado en Madrid, 15 de junio de 1808 Firmado por Bartolomé Muñoz

Manuscritos e impresos, Sello de placa en la h. 71v del v. 11, Título en el tejuelo: Legislación de Real Hacienda, Numerosos versos en blanco en todos los volúmenes, Hojas en blanco y sin foliar entre las h. 19-20, 24-25, 27-28, 34-35, 95-96 y 168-169 (v. 1), Una h. en blanco y sin foliar entre las h. 7-8; repetidas las h. 137 y 232 (v. 2), En blanco las h. 90 y 271-273; repetidas las h. 39, 64, 127 (v. 3), En blanco las h. 40, 382, 400, 410, 424, 489r, 574v-584, 638, 644 y 650; sueltas las h. 120-122, 443-444 (v. 4), En blanco las h. 62, 128, 130, 136r, 149v-150r, 151r, 190, 227, 364r, 402, 462, 481-482r; mutiladas con pérdida de texto las h. 1-2, 131, 228-231, 275-287, 495-501; plegadas las h. 457-461 (v. 5), En blanco las h. 52, 110, 153, 161, 197, 225, 227, 249, 255, 261, 286, 287, 301r, 322, 333, 334, 346, 368, 422, 449, 510, 555 y 572; repetida la h. 516 (v. 6), En blanco las h. 2, 4, 8, 14, 26, 48, 54, 66, 104, 114, 122, 134, 136, 158, 194r, 196, 200, 218, 231, 238, 242, 266, 268, 294, 319, 321, 323, 324, 358, 372, 374, 403, 404 y 434r (v. 7), En blanco las h. 43, 67, 69, 71, 77, 82, 83, 88, 92, 94, 105bis, 118, 140, 142, 155, 156, 158, 168, 192, 194, 196, 198, 200, 207, 209, 215r, 226, 227, 282, 311-314, 328 y 329; repetida la h. 105; sueltas las h. 284-291; plegadas las h. 252, 315, 316 y 317 (v. 8), En blanco las h. 14, 50, 51, 55-57, 62, 63, 68-71, 77, 87, 90, 91, 130, 131, 193, 230, 276, 282, 295, 301, 307, 315, 323, 327, 337, 350-353, 370, 374, 376, 379, 382, 388r, 389, 391, 395, 421, 441, 452, 458, 503bis, 511 y 552; repetidas las h. 292 y 503; sueltas las h. 67-68, 96-97, 132-139, 310-313, 510-511 y 516-517 (v. 9), En blanco las h. 9, 11, 13, 17, 103, 104, 130, 148, 165, 166, 204, 206, 208, 209, 218, 356, 362, 412, 413, 429, 549, 551, 558, 576; sueltas las h. 557-558 (v. 10), En blanco las h. 2, 27, 36, 38, 41, 44, 47, 52, 56, 79, 113, 173, 181, 182, 253, 373, 377, 395, 441, 445, 447, 455, 459, 471 y 488; sueltas las h. 381-392, 475-476 y 479-480 (v. 11)

Real Cédula de S.M. Felipe V, organizando el Consejo de Hacienda y dictando reglas sobre su funcionamiento, Cédula Real dada en San Lorenço el Real del Escorial el 3 de julio de 1718, Real Cédula de S.M. Felipe V, organizando el Consejo de Hacienda y dictando reglas sobre su funcionamiento, Se ha respetado la puntuación original, Figura al final del texto: "Don Francisco Diaz Roman", Copia fechada en Madrid a 4 de julio de 1718, Sign.: A⁴, Impreso en papel timbrado con fecha de 1718