Short-term rentals (STRs) emerged as holiday accommodations, disrupting the hospitality industry in the decade before COVID-19. Mainstream explanations for their growth revolved around digital tourism platforms like Airbnb as market disruptors and the sharing economy rationale. At the same time, critical scholars explored the capitalisation of greater rent gaps in urban central locations. However, these explanations are insufficient to explain the growth of STRs. We supplement them by building bridges between the urban political economy and the geographies of financialisation through the cases of Lisbon and Porto before the pandemic. The paper focuses on tourism-induced housing investment, taking a closer look at the profile of investors in association with STR property managers in the context of the late-entrepreneurial urban regime. We conclude that tourism development has allowed opportunities for housing financialisation through STR professionalisation, enhancing the allocation of interest-bearing capital in tourism-oriented real estate., Los alquileres de corta duración (STRs en sus siglas en inglés) surgieron como alojamientos vacacionales, revolucionando la industria turística en la década anterior al Covid-19. Las principales explicaciones sobre su irrupción apuntan a que las plataformas de turismo digital, como Airbnb, alteraron el mercado a través de la lógica de la economía colaborativa, mientras que voces críticas también han explorado la capitalización de brechas de renta más amplias en áreas urbanas centrales. Sin embargo, estas explicaciones son insuficientes para comprender el rápido crecimiento de esta tipología de alojamiento. Aquí se complementan tales ideas mediante la articulación entre la economía política urbana y las geografías de la financiarización a través de los casos de Lisboa y Oporto antes de la pandemia. El artículo se centra en la inversión inmobiliaria inducida por el turismo, examinando el perfil de los inversores privados en conjunción con las empresas de gestión de propiedades para alquiler turístico en el contexto del urbanismo empresarial tardío. Así, concluimos que el desarrollo turístico reciente ha ampliado el horizonte de financiarización de la vivienda gracias a la profesionalización del alquiler vacacional, maximizando los beneficios del capital invertido en bienes inmobiliarios para uso turístico.