Los algoritmos de control de admisión en redes alambradas pueden monitorear el tráfico sobre cada uno de los enlaces punto-a-punto con el fin de determinar el ancho de banda disponible para los flujos a lo largo de diferentes rutas y basar su decisión en la diferencia entre el ancho de banda disponible y el ancho de banda requerido. Infortunadamente, esto no es posible en una red móvil ad hoc (MANET) por varias razones, entre las que se destacan dos: (1) en la MANET, una transmisión entre dos nodos adyacentes consume el ancho de banda de muchos nodos vecinos, lo cual dificulta la estimación del ancho de banda disponible. (2) Un nodo que se admite tiene un efecto sobre la red que va mucho más allá de reducir el ancho de banda disponible en una cantidad previsible; al contrario, puede afectar la distribución espacial de los flujos existentes así como las probabilidades de colisión. En estas condiciones, no es fácil para un algoritmo de control de admisión determinar la magnitud de los flujos que deben ser admitidos para aprovechar los recursos de comunicación sin saturar la red. Este es un artículo de reflexión en el que discutimos algunos de los principales aspectos asociados con la interacción entre estos dos problemas fundamentales y proponemos un nuevo enfoque de investigación al respecto. The admission control algorithms in wired networks can monitor traffic on each of the links point-to-point in order to determine the available bandwidth for the flows along different routes and base their decision the difference between the available bandwidth and the bandwidth required. Unfortunately, this is not possible in a mobile ad hoc network (MANET) for several reasons, among which two stands out: (1) In the MANET, a transfer between two adjacent nodes consumes the bandwidth of many neighbors, which difficult to estimate the available bandwidth. (2) A node that supports has an effect on the network that goes far beyond reducing the bandwidth available in a predictable amount, on the contrary, it can affect the spatial distribution of existing flows and the likelihood of collision. In these conditions, it is easy for an admission control algorithm to determine the magnitude of the flows should be admitted to exploit the resources of communication without saturating the network. This is a refection article where we discuss some major issues associated with the interaction between these two fundamental problems and propose a new approach to investigation.