Search

Groundwater sources require previous treatment. Complexity of water purification depends on microbiological and physical-chemical properties of water. The current groundwater classification guidelines are out-of-date, and they do not respond to the aqueduct operators’ needs to determine whether using new groundwater sources is feasible. This document aims to develop a method for classifying potential groundwater sources in Costa Rica according to their complexity for treating and purifying drinking water. This work stablished four categories (A, B, C and D) for classifying potential groundwater sources, along with the maximum limits allowed for each parameter. The failure to comply with these limits links the source to a specific category that varies depending on the parameter. Comparison was made between the former guidelines and those proposed in this document: former guidelines respond to health assessment and possible water rejection due to its aesthetics features, whereas the guidelines proposed respond to aqueduct operators’ requirements giving them tolls to assess feasibility of potential groundwater sources. Additional information is required to determine the start-up of groundwater sources, i.e., flow rate measurement and vulnerability, water availability, and supply and demand. El agua proveniente de fuentes de abastecimiento requiere de un tratamiento previo para su posterior distribución. La complejidad del proceso de potabilización va a depender de las propiedades fisicoquímicas y microbiológicas del agua. Los criterios vigentes para evaluar las fuentes de abastecimiento subterráneas y subsuperficiales se encuentran desactualizados y no responden a las necesidades de los entes operadores para determinar la factibilidad del uso de nuevas fuentes de abastecimiento. El presente documento busca desarrollar un método para clasificar las potenciales fuentes de abastecimiento subterráneas y subsuperficiales en Costa Rica, según la dificultad que conlleva su potabilización. Se establecieron cuatro categorías (A, B, C y D) para clasificar potenciales fuentes y se definieron límites para cada parámetro. Cada parámetro relaciona a la fuente con una determinada categoría, en caso de sobrepasarse el límite. Se comparó la clasificación mediante los criterios vigentes y los propuestos para pozos y nacientes: la clasificación vigente responde a criterios de salud y de posible rechazo del agua por los consumidores, pero no evalúa el grado de dificultad para potabilizar la fuente; mientras que la clasificación propuesta, responde a las necesidades de los entes operadores, brindando una herramienta para poder valorar el ingreso de una nueva fuente al sistema de abastecimiento. La evaluación de la viabilidad de las fuentes requiere de información adicional, como la medición del caudal y su vulnerabilidad, disponibilidad de otras fuentes, la oferta y demanda del servicio de abastecimiento, entre otras.