Ros, Emilio, López-Miranda, José, Picó, Catalina, Rubio, Miguel Ángel, Babio, Nancy, Sala-Vila, Aleix, Pérez-Jiménez, Francisco, Escrich, Eduard, Bulló, Mónica, Solanas, Montserrat, Gil Hernández, Angel, and Salas-Salvadó, Jordi
La calidad de la grasa dietética tiene una profundainfluencia sobre la salud. En este documento de consensose evalúa la evidencia científica relativa a los efectosde la cantidad y calidad de la grasa alimentaria sobrela salud cardiovascular y se emiten recomendacionespara la población española adulta. Como novedad enunas guías nutricionales, se hace menos hincapié en losácidos grasos per se que en los alimentos que los contienen. En resumen, sustituir ácidos grasos saturados (AGS) por monoinsaturados (AGM) y poliinsaturados(AGP) reduce el riesgo cardiovascular. Datos recientessugieren que la ingesta de AGS per se es nociva soloen función del alimento que los contiene, por lo que noparece oportuno establecer un umbral de ingesta, pero se desaconsejan alimentos que los contienen en exceso, como la mantequilla y algunos derivados cárnicos, bollería y fritos comercial 1% de la ingestade energía en forma de AG trans, nocivos para el riesgocardiovascular, se cumple en España en buena parte por su bajo nivel actual en las margarinas. Los AGM son beneficiososo neutros para el riesgo cardiovascular segúnsu fuente dietética (aceite de oliva virgen frente a otrasgrasas), y no se establecen limitaciones de ingesta. LosAGP n-6 son cardioprotectores y el nivel recomendablede ingesta (5-10 % de la energía) no siempre se cumpleen la población española, que debería aumentar el consumode sus fuentes vegetales (semillas, aceites derivadosy margarinas). Los AGP n-3 de origen marino soncardioprotectores y se recomienda consumir pescadograso ≥2 veces/semana para cumplir con la recomendaciónde al menos 250 mg/día. Existen evidencias crecientesde que el ácido alfa-linolénico (ALA), el AGP n-3 de origen vegetal, también es cardioprotector, pero losalimentos que lo contienen (nueces, soja, vegetales dehoja verde) pueden ser beneficiosos más allá del propio ALA. Finalmente, las dietas bajas en grasa (altas en hidratosde carbono, particularmente aquellas con un alto índiceglicémico) carecen de efecto preventivo cardiovascular,mientras que las altas en grasa de origen vegetal, como ladieta mediterránea, son protectoras, razón por la que enEspaña no parece necesario establecer un dintel superiorde ingesta de grasa. Este documento de consenso se dirigea dietistas, nutricionistas y otros profesionales que danconsejo dietético para que puedan hacerlo de una manerarazonada y acorde con la última evidencia científica. The quality of dietary fat critically influences health.In this consensus document the scientific evidence relatingeffects of dietary fat quantity and quality on cardiovascularrisk is reviewed and recommendations forthe Spanish adult population are issued. As a novelty innutrition guidelines, emphasis is made more on parentfoods than on fatty acids per se. In summary, replacingsaturated fatty acids (SFA) for monounsaturated fattyacids (MUFA) and polyunsaturated fatty acids (PUFA)reduces cardiovascular risk. Recent data suggest thatSFA proper may be harmful or not depending on the parentfood, a reason why an intake threshold is not established,but consumption of foods containing excess SFA,such as butter, some processed meats, and commercialconfectionery and fried foods is discouraged. The establishedthreshold of 1 % of energy intake as trans FA, well known to be harmful for cardiovascular risk, is fulfilledin Spain due in part to its present low levels in margarines.MUFA are beneficial or neutral for cardiovascularrisk depending on their dietary sources (virgin olive oilversus other fats), and no intake limitations are established.n-6 PUFA are cardioprotective and recommendedintakes (5-10% of energy) are not always fulfilled in theSpanish population, thus increased consumption of theirvegetable food sources (seeds, derived oils, and margarines)is encouraged. Marine n-3 PUFA are also cardioprotectiveand the recommendation stands to eat fatty fish ≥2 servings/weeks to reach intake levels of at least 250 mg/day. Increasing evidence suggests that alpha-linolenicacid (ALA), the vegetable n-3 PUFA, is also cardioprotective,but the parent foods (walnuts, soy products,green-leaf vegetables) may provide benefits beyond ALA itself. Finally, low-fat (high carbohydrate, particularlywhen having a high glycemic index) diets appear tolack cardiovascular preventive effects, while high-fat, high-vegetable fat dietary patterns such as the Mediterraneandiet, are protective, a reason why no upper limiton fat intake is established for the Spanish population. This position statement targets dietitians, nutritionistsand other health professionals involved in dietary counselso they can deliver it rightly and according to the lastscientific evidence.