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El cáncer de pulmón (CP) constituye un grave problema de salud pública debido a dos aspectos de la enfermedad: su alta incidencia y elevada mortalidad. Aunque se sabe que el tabaco es el principal factor de riesgo para el desarrollo del CP, hasta un 25% de los casos a nivel mundial, con amplias variaciones geográficas y de género, se diagnostican en individuos nunca fumadores, lo que implica la existencia de otros factores de riesgo como el radón residencial, considerado actualmente el segundo factor de riesgo en fumadores y exfumadores y el primero en nunca fumadores. Se han realizado numerosas investigaciones sobre la influencia de la exposición a radón residencial en el riesgo de desarrollar CP pero son muy pocos los estudios realizados hasta la fecha en los que se hayan incluido exclusivamente nunca fumadores. Nuestra investigación pretende analizar el riesgo de CP en nunca fumadores en una población con alta exposición a radón residencial. Para ello se diseñó un estudio multicéntrico de casos y controles, de base hospitalaria, en el que se incluyeron todos los casos de CP diagnosticados entre enero de 2011 y junio de 2013 en nunca fumadores en todos los centros participantes. Se analizó el riesgo de CP en relación con la concentración de radón en el domicilio, la posible sinergia entre radón y tabaquismo pasivo, medido como años de convivencia con fumadores, y la posible influencia de la exposición a radón en algunas características de la enfermedad: tipo histológico, edad de presentación y estadio al diagnóstico. El resultado más relevante es la demostración de que las personas nunca fumadoras expuestas a concentraciones de radón residencial > 200Bq/m3 tienen un riesgo estadísticamente significativo de desarrollar CP 2,2 veces superior frente a aquellos expuestos a < 100Bq/m3 . La convivencia con fumadores de 1 a 35 años incrementa este riesgo hasta 2,8 (IC95% 1,4 – 5,2).

Introducción: El radón presenta un riesgo para la salud por el efecto carcinogénico a nivel pulmonar de la radiación alfa que emite en la transformación radiactiva de sus descendientes de corta vida media. Galicia es un área de especial interés para el análisis de las concentraciones de radón residencial por su sustrato geológico. Objetivos: Conocer el riesgo de cáncer de pulmón derivado de la exposición a radón residencial en el área sanitaria de Ourense, cuantificar las concentraciones de radón en los domicilios del área sanitaria de Ourense, y clasificar estos domicilios en función de su concentración de radón. Métodos: Estudio de casos y controles de base hospitalaria en el Área Sanitaria de Ourense. Sujetos: Se incluyeron casos consecutivos con diagnóstico anatomopatológico de cáncer primario pulmonar; y controles seleccionados según muestreo por frecuencia de sexo y edad, que acudiesen al hospital por patologías que no estuviesen asociadas con el consumo de tabaco. Resultados: Se observó una asociación estadísticamente significativa (una vez ajustado por edad, sexo y consumo de tabaco) entre la concentración de radón residencial y el cáncer de pulmón a partir de los 50 Bq/m3, con una OR de 3’1 (IC95% 1’3-7’5) para los expuestos a 50-100 Bq/m3; de 4’3 (IC95% 1’5-12’1) para los expuestos a 101-147 Bq/m3; y de 2’9 (IC95% 1’1-7’5) para los expuestos a más de 148 Bq/m3. El ajuste por el consumo de tabaco aumenta significativamente el valor de las estimaciones puntuales del riesgo. El 18’9% de los domicilios estudiados superan los 148 Bq/m3 Conclusión: La concentración de radón residencial incluso a bajas concentraciones supone un riesgo para el desarrollo de cáncer de pulmón, siendo incrementado este riesgo con el consumo de tabaco. Un porcentaje importante de los domicilios orensanos presentan elevadas concentraciones de radón residencial.

La EPOC es una de las patologías más prevalentes en la actualidad y genera una gran morbilidad y mortalidad a nivel global, con un fuerte impacto social y sobre el sistema sanitario. La evidente escasez de estudios que analicen la mortalidad, el lugar de fallecimiento y las hospitalizaciones relacionadas con esta enfermedad justifica la elaboración de este proyecto de tesis que puede ser de utilidad para hacer estimaciones futuras y reorientar estrategias asistenciales y preventivas.

Traballo Fin de Grao en Medicina. Curso 2020-2021 1.1. ANTECEDENTES: Se realizó una revisión bibliográfica de la literatura científica para comparar las características epidemiológicas del SARS-CoV, MERS-CoV y SARS-CoV-2. Es relevante hacer un análisis comparativo de las tres epidemias de coronavirus descritas hasta la fecha para entender cómo abordar la pandemia de COVID-19. Las similitudes y las diferencias entre el ellos pueden servir como guía para mejorar las medidas de prevención y para llegar a una mejor comprensión de la propagación de futuras epidemias. Los coronavirus humanos se consideraban patógenos respiratorios relativamente inofensivos hasta la aparición del brote de SARS-CoV en 2002. Desde entonces, han recibido atención como patógenos importantes en las infecciones respiratorias. Posteriormente, con la aparición del MERS en 2012 y del COVID-19 en 2019, han acaparado aún más la atención internacional. Hay que señalar que todos los datos de la pandemia de COVID-19 están en constante revisión y sujetos a posibles variaciones por la publicación de nuevos estudios. 1.2. MÉTODOS: Las búsquedas se realizaron en las bases de datos de MEDLINE (Pubmed) y Cochrane Library utilizando términos específicos. Con el objetivo de obtener la información epidemiológica más actualizada respecto a los patógenos analizados, se visitaron las páginas web de los organismos oficiales de distintos países. También se realizaron búsquedas de información en la página web de la OMS (Organización Mundial de la Salud) y de la Universidad Johns Hopkins. La última fecha en que se realizaron dichas búsquedas fue el 17 de abril de 2021. 1.3. OBJETIVOS: Llevar a cabo una revisión de las diferencias en la epidemiología que permita valorar el diferente impacto que ha tenido cada coronavirus a nivel mundial y los motivos de dicho impacto. 1.4. RESULTADOS: El virus que ha presentado un mayor número de casos es el SARS-CoV-2 registrando 139.501.934 (17/04/2021) con una tasa de letalidad del 2,15%. El virus que presenta una mayor tasa de letalidad es el MERS-CoV con un 34,33%, pero sólo ha registrado un total de 2.499 casos (31/12/2019). La única epidemia que se ha logrado contener por completo fue la del SARS, que registró 8.098 casos y una tasa de letalidad del 9,56%. Tanto el SARS como el MERS han registrado grandes eventos de propagación a través del personal sanitario y de la infección nosocomial, sin embargo, en el caso del COVID-19 no se ha observado una especial propagación a través de este medio. Ciertos parámetros como el número básico de reproducción son determinantes para conocer la capacidad de transmisión de cada virus: SARS R0 ligeramente mayor de 3; MERS R0 inferior a 1; COVID-19 R0 entre 2,8 y 3,9. 1.5. CONCLUSIONES: El COVID-19 es el virus que mayor impacto ha generado a nivel mundial, siendo el parámetro más relevante: la incidencia. Dicho impacto se debe, entre otros factores, a la gran capacidad de transmisión y al elevado porcentaje de casos asintomáticos que impiden trazar el virus con exactitud. Resulta menos relevante el valor de letalidad, ya que la tasa de letalidad registrada por este es significativamente menor que la del SARS y del MERS. Comparando el COVID-19 con el SARS, destaca que el inicio de la infecciosidad en el primero se produce 0,7 días antes del inicio de los síntomas y en el segundo se produce 7-10 días después del inicio de los síntomas. Este hecho provoca que las medidas de aislamiento y cuarentena sean más efectivas para frenar la propagación en el caso del SARS. Comparando el COVID-19 con el MERS, destaca que se estima un R0 para el MERS inferior a 1, siendo el del COVID-19 entre 2,8 y 3,9. Este dato implica que el MERS presenta una transmisión no sostenida del virus y que se puede producir la extinción de los brotes sin necesidad de aplicar medidas de control comunitario

Traballo Fin de Grao en Medicina. Curso 2020-2021 Complementando diferentes estrategias de control y mientras los programas de vacunación surgían efecto muchos países buscaron apoyar el rastreo de contactos COVID-19 con el uso de aplicaciones digitales. La principal función de estas es el registro automático del tiempo de interacción entre sus usuarios para la detección de contactos de riesgo y acelerar el diagnostico de nuevas infecciones. El uso de estas aplicaciones genera controversias, principalmente por cuestiones de privacidad y seguridad, y la posible vulneración de la legislación de protección de datos de cada país. Nuestro objetivo es revisar la evidencia disponible sobre las aplicaciones de rastreo de contactos; en esta revisión analizamos específicamente los países que las han implementado, sus características y la posible efectividad en el control de la pandemia. Realizamos una revisión sistematizada de estudios observacionales o de modelado matemático publicados en español e inglés indexados en Pubmed y Cochrane sobre estas aplicaciones. Tras la evaluación de calidad, sintetizamos la información por países en cuanto finalidad, tecnología, gestión de datos, fecha de distribución, nivel de adopción y su posible influencia en el control pandémico. Se analizan 54 publicaciones que hacen referencia a 83 aplicaciones de rastreo digital de 62 países, de ellas 35 usan un sistema de rastreo por proximidad, 16 por geolocalización, 17 por geolocalización y proximidad, siendo una minoría las que usan otros sistemas, principalmente en Asia. Parece que, para que sean útiles por si mismas, deben ser adoptadas por al menos el 60-80% de la población, aunque con cifras del 20-25% reducen la transmisibilidad si se aplican simultáneamente con otras medidas de salud publica. Pese al potencial beneficio que aportan en el control de la pandemia su adopción en occidente ha sido limitada, de ahí que se deban idear medidas para vencer resistencias, interconectar servicios y demostrar su utilidad en los nuevos escenarios diferentes estratexias de control e mentres os programas de vacinación estaban entrando en vigor, moitos países intentaron apoiar o rastrexo de contactos COVID-19 co uso de aplicacións dixitais. A súa función principal é rexistrar automaticamente o tempo de interacción entre os seus usuarios para detectar contactos de risco e acelerar o diagnóstico de novas infeccións. O uso destas aplicacións xera controversias, principalmente por problemas de privacidade e seguridade, e a posible violación da lexislación de protección de datos de cada país. O noso obxectivo é revisar a evidencia dispoñible sobre as aplicacións de rastrexo de contactos; Nesta revisión, analizamos especificamente os países que as implementaron, as súas características e a súa posible eficacia no control da pandemia. Realizamos unha revisión sistemática de estudos de modelos observacionais ou matemáticos publicados en español e inglés indexados en Pubmed e Cochrane sobre estas aplicacións. Despois da avaliación da calidade, sintetizamos a información por países sobre propósito, tecnoloxía, xestión de datos, data de distribución, nivel de adopción e a súa posible influencia no control da pandemia. Analízanse 54 publicacións que fan referencia a 83 aplicacións de rastrexo dixital de 62 países, das cales 35 utilizan un sistema de rastrexo de proximidade, 16 por xeolocalización, 17 por xeolocalización e proximidade, sendo unha minoría as que utilizan outros sistemas como códigos QR, principalmente en Asia. Parece que, para seren útiles por si mesmas, deben ser adoptados polo menos polo 60-80% da poboación, aínda que con cifras do 20 ao 25% reducen a transmisibilidade se se aplican simultaneamente con outras medidas de saúde pública. A pesar do potencial beneficio que proporcionan no control da pandemia, a súa adopción en Occidente foi limitada, polo que hai que idear medidas para superar a resistencia, interconectar servizos e demostrar a súa utilidade en novos escenarios Many countries sought to support COVID-19 contact tracing with the use of digital applications as a supplement for different control strategies and while vaccination programmes are emerging. The main function of these is the automatic recording of interaction time between users to detect risk contacts and accelerate the diagnosis of new infections. The use of these applications generates controversy, mainly due to privacy and security issues, and the possible violation of data protection legislation in each country. Our objective is to review the evidence about contact tracing applications; in this review we specifically analyse the countries that have implemented them, their characteristics and their possible effectiveness in controlling the pandemic. We conducted a systematised review of observational or mathematical modelling studies published in English and Spanish and indexed in Pubmed and Cochrane. After quality assessment, we synthesised the information by country in terms of purpose, technology, data management, date of distribution, level of adoption and their potential influence on pandemic control. We analysed 54 publications referring to 83 digital tracking applications from 62 countries, of which 35 use a proximity tracking system, 16 use geolocation, 17 use geolocation and proximity, and a minority use other systems like QR codes, mainly in Asia. It appears that, to be useful on their own, they need to be adopted by at least 60-80% of the population, although levels of 20-25% reduce transmissibility if applied simultaneously with other public health measures. Despite their potential benefit in pandemic control, their adoption in Western countries has been limited, hence interventions must be devised to overcome resistance, link services and demonstrate their usefulness in new epidemiologic scenario