Si bien la producción poética y narrativa sefardí es bien conocida, en Italia falta un estudio de la producción dramática, un género amado y atendido por el público sefardí. La tendencia de los estudiosos es considerar los primeros siglos de la diáspora como un período escasamente prolífico desde un punto de vista artístico, precisamente debido a las migraciones que involucraron a comunidades enteras. Por el contrario, en el caso italiano, algunos investigadores han hablado de un «Siglo de oro de las letras sefardíes», un florecimiento cultural que se justifica con la estabilidad socioeconómica que las comunidades alcanzaron entre los siglos XVI y XVII, una condición necesaria para que también la literatura pudiera desarrollarse en un ambiente no tan conflictivo; por ejemplo, el texto inédito Entremés de un dotor (1616) es un fruto de ese contexto. Por estas razones, en las páginas que siguen nos proponemos estudiar la influencia de la cultura sefardí en el teatro italiano, en particular centrándonos en el área de la Toscana, una región que, desde la expulsión, se transformó en un «puerto seguro» para los hebreos ibéricos. El objetivo es detectar la posible contribución de los sefardíes en el drama italiano desde finales del Renacimiento y el Barroco hasta la época moderna. Para acercarnos a nuestro objetivo, primero presentaremos una serie de reflexiones sobre la definición de «identidad sefardí» y después comentaremos algunas experiencias teatrales surgidas en el ámbito judeo-español italiano.