COVID-19, unlike the other regions of the country, reached the land of Mercury with the exodus from the city to the countryside, of the children residing in the capital, carrying with them the Coronavirus that massively infected the population. In this article we address and analyze, from a tripartite perspective, the crisis of the phenomenal event, an opportunity to reflect on relevant issues –which go beyond the economic or biopolitical approach– for the human being: the meaning of life, the allin or sumaq kawsay (good living); the human condition of mortality; how to articulate social isolation with mental health and uncertainty; individualism versus Andean collectivism. Finally, we address corruption in health, education and even in humanitarian support. Knowing that these are fundamental pillars for the development of the family, the people and the nation. Relevant topics that we share from the Central Andes. El COVID-19, a diferencia de las otras regiones del país, llegó a la tierra del Mercurio con el éxodo de la ciudad al campo, de los hijos residentes en la capital, llevando consigo el Coronavirus que contagió masivamente a la población. En este artículo abordamos y analizamos, desde una visión tripartita, la crisis del hecho fenoménico, ocasión para reflexionar sobre temas relevantes –que van más allá del enfoque económico o biopolítico– para el ser humano: el sentido de la vida, el allin o sumaq kawsay (el buen vivir); la condición humana de la mortalidad; cómo articular el aislamiento social con la salud mental y la incertidumbre; el individualismo frente al colectivismo andino. Finalmente, abordamos sobre la corrupción en la sanidad, educación e incluso en el apoyo humanitario. Sabiendo que aquéllas son pilares fundamentales para el desarrollo de la familia, el pueblo y la nación. Temas relevantes que compartimos desde los Andes Centrales.